CAPÍTULO 33

Hola! Gracias chicas por entender! Perdonen la demora, pero también estuve de vacaciones en Bogotá con una prima y bueh... quería descansar en forma. Les cuento que empece esta semana en la U a estudiar Psicología! Estoy feliz.

Les agradezco mucho el apoyo y los buenos deseos!

*Imagen editada por Damu! Gracias :)

ESTE CAPÍTULO VA DEDICADO A CHARI! He vuelto como te dije ;) Te quiero!

EN EL CAPÍTULO ANTERIOR....

En ese momento sonó el citófono anunciando la llegada de alguno de los invitados. Rogaba por que fuera Mery.

Lo descolgó y hablo- Buenas?

-Hola, soy Nicolas Riera, vengo con Peter. –le dijo una voz masculina.

-Hola, -toco un botón al lado del citófono que abría las puertas- Abran.

-Gracias. –le dijo Nicolas antes de que ambos colgaran.

<<El que yo ruegue por una cosa es como pedir lo contrario!>> pensó no muy contenta de que ellos llegaran sin tener a Mery a su lado.

Capítulo 33

Fue a la cocina y coloco el horno de modo que mantuviera la cena caliente. Luego camino rápidamente a la sala y se coloco los botines negros que había dejado allí antes, sonó el timbre, y se los termino de poner mientras caminaba hacia la puerta, se paro antes de abrir.

Respiro hondo, contó hasta 10 mentalmente, soltó el aire y abrió la puerta con una sonrisa.

-Buenas noches  –dijo al mirar a Nico- Pasa… -abriéndole camino para que entrara.

-Buenas noches, Lali –dijo Nico, entrando y dándole un beso en la mejilla.- Peter ya sube, le han hablado al celular y era importante.

Nico iba vestido con un jean, una camiseta negra con estampado y una chaqueta de cuero negra.

-Ok. –cerro la puerta y se dirigieron hacia la sala- Quieres tomar algo? Tengo cerveza, vino o Whisky, si prefieres?

-Me tomo una cerveza, gracias.

Lali fue a la cocina y volvió con un vaso y la cerveza de Nico.

-Como has estado?

-Bien, ya sabes del accidente, así que, alguno que otro morado aun tengo y –levantando su mano izquierda enyesada- la mano, pero la verdad es que ya estoy muy bien.

-Me alegro mucho, Lali. Y de verdad espero que pronto te quiten el yeso y estés perfectamente. –dijo con una sonrisa sincera.- Por cierto, estas muy bella esta noche.

-Muchas gracias –le sonrió-Tu también.

-Oh! Crees que estoy bello. –le dijo Nico sarcástico.

Lali rio e ignoro el comentario- Y tu como has estado?

-Muy bien, la verdad, ultimando todo los detalles para vivir aquí en Buenos Aires.

-Oh! Que bien! Me alegro y espero que todo te salga como desees.

-Gracias –le dijo Nico con una sonrisa y alzando su vaso con cerveza a modo de brindis. Suena el timbre. –Ah ese debe ser Peter.

-Ya atiendo.

Lali fue a abrir la puerta y se encontró con Peter apoyado en un costado de la puerta mirando hacia el piso, vestido de traje, con un saco y pantalón negro, una camisa blanca, con los dos primeros botones sin abotonar, y sin corbata. Una visión verdaderamente sensual y tentadora, eso no lo podía negar.

El levanto la cabeza para mirarla con una sonrisa en su boca, sonrisa que se fue desvaneciendo a medida que recorría su cuerpo con la mirada.

Ambos se quedaron en silencio un momento, simplemente observándose.

Lali fue la primera en hablar.

-Hola… -dijo en un susurro ronco- Pasa… -le ofreció quitándose del marco de la puerta para darle paso.

Peter se alejo del marco de la puerta y dio un paso adentro, sin hablar, temiendo que su voz delatara el deseo tan fuerte que lo había sacudido al verla en esos tacones y con ese vestido negro, que acentuaba perfectamente sus exuberantes curvas. Y esos labios… como deseaba besar esos exquisitos labios, hechos definitivamente por Dios con ese único propósito… o al menos eso podría jurar él.

Impulsado por algo desconocido se acerco a ella hasta que sus cuerpos estuvieron tan cerca que nada podría separarlos, fue bajando lentamente la cabeza hacia la de ella, impulsado por un deseo incontrolable de besarla…

Pero justo cuando estaba a pocos centímetros de sus labios se alejo un poco y cambio de dirección, dándole un beso en la mejilla y luego dando un paso atrás para poner algo de distancia entra los dos.

Lali, se quedo inmóvil. Confundida, sorprendida y muy a su pesar, deseosa de que algo mas hubiera pasado.

Ambos se tomaron unos segundos para recobrar la compostura, para recomponerse de ese momento de… de que? Se preguntaba Lali.

-Buenas noches, Lali. Estas muy hermosa.

-Gracias –dijo Lali sonrojándose un poco por el halago.- En la sala esta Nico, quieres algo para beber? –le ofreció mientras caminaban hacia la sala.

<<Algo bien fuerte, es lo que necesito>> pensó Peter.

-Cualquier cosa esta bien, muchas gracias.

-Whisky?

-Perfecto.

Lali salió rápido hacia la cocina, a pesar de que el bar estaba en la sala.

-Peter te demoraste en subir, eh! -Escucho que hablaba Nico en la sala.

¿Qué le había pasado en la puerta? Ella tenía muy claro que ahora no quería ni debía tener ninguna relación, además le tenia cariño a Peter y quería conseguir que tuviera una linda amistad, nunca algo mas.

-Nunca algo mas… -repitió en voz baja su pensamiento, mientras se servía en un vaso agua.

Volvió a la sala y se encontró con Peter y Nico hablando de algo relacionado con la llamada que él tuvo antes de subir. Sirvió el Whisky y se lo dejo en la mesa, frente a él. Temiendo su contacto.

<<Las hormonas! Eso es!>> pensó Lali.

Peter le agradeció y ella se sentó diagonal a Peter y al lado de Nico. Empezaron a hablar de cosas  triviales, gracias a Nico, y a reírse de sus bromas y sus anécdotas.

Quince minutos más tarde sonó el timbre. Lali se paro y fue a abrir.

Agradecida de tener que salir de allí, a pesar de que por Nico estaban pasando un buen momento, Peter le lanzaba miradas furtivas que la dejaban helada… bueno, tal vez esa no fuera la mejor palabra para describir lo que la hacían sentir. Nerviosa, tal vez.

-Mery hola! Por un momento creí que no vendrías. –dijo al ver a su amiga en el pasillo.

-Te dije que iba a venir! –dijo abrazándola a modo de saludo. Luego en un susurro, continuó- No te iba dejar sola en la emboscada.

-Gracias, la verdad es que te necesito. Pasa ya voy a servir la cena. Peter y Nico están en la sala.

Al escuchar eso Mery se paro en seco y se volteo, levantando una ceja, pregunta- Peter? Lanzani?

-Si, Peter Lanzani! Y quita esa cara que no es nada de lo que te imaginas!

-Ok, ok… -responde con una sonrisa, no muy convencida.

-Ve más bien a la sala y saluda que ya llevo la cena.

Mery le dirigió una última sonrisa y siguió hacia el interior del apartamento. Al ver a los dos hombres, se acerco primero a Nico para saludarlo con un beso y luego a Peter.

-Peter, que sorpresa verte hoy! Y aquí! –le dijo Mery con una mirada que indicaba mas que sorpresa, indicaba complicidad.

<<Esa mirada de Mery, ¿Qué? >> pensó Peter.

-Que te puedo decir, he sido invitado. –le contesto Peter con una sonrisa.

-Si…! Por que no vas a la cocina y le ayudas a Lali con los platos? La cena ya se va a servir.

-Si, claro –dijo algo sorprendido por la petición de Mery- Con permiso.

Cuando Peter salió, Nico miro a Mery  sorprendido e intrigado en partes iguales.

-Me puedes explicar que estas haciendo?

-De que hablas? –le dijo Mery utilizando todos sus dotes de actuación para parecer inocente. Fallando miserablemente ante los ojos de Nico.

-Esta bien, no me digas pero te advierto que no te será fácil...

Mery solo le sonrió y se sentó a su lado.

Continuara....