CAPÍTULOS 48 Y 49
Falta poco para el final de la nove!
Ella levantó los
ojos y él se sintió morir. Quería perderse en aquellos ojos.
-Yo recogeré la
mesa -dijo él-. Vete a descansar un rato. Cuando Lucas se despierte nos iremos
a dar una vuelta.
Capítulo 48
Dos días después
se cambiaron de casa.
-Tiene todo lo
que una familia puede desear - dijo el vendedor que ya había dejado de tratar
de entender qué tipo de relación había entre ellos.
Lali estaba
totalmente encantada. Era la casa de sus sueños: grande, espaciosa, con un
recibidor que permitía meter el cochecito de Chris. La cocina también era muy
grande y las habitaciones tenían los techos altos.
En la parte de
atrás, tenían un pequeño jardín en el que un niño podría jugar tranquilamente.
-Vamos a tardar
bastante en ponerla bien -dijo ella.
-Eso nos hará
disfrutarla más.
Lo que era
cierto para una casa, pero muy doloroso en lo que al cuerpo se refería.
A la semana
siguiente, Peter ya tuvo que volver al trabajar.
Una parte de él
se sentía mal por tener que abandonar a Chris y, lo quisiera o no admitir,
también le iba a doler no poder estar con Lali.
Durante aquellas
semanas había vivido un tipo de vida completamente diferente al que estaba habituado.
Tenía que admitir que había sido tremendamente agradable.
Le iba a costar
volver a la vida ante los tribunales.
A pesar de todo,
otra parte de él se sentía aliviada de no tener que enfrentarse a la vida junto
a Lali.
Estaba empezando a resultarle realmente difícil controlarse.
El día anterior
había sido particularmente difícil.
Había sido San
Valentín. Todo el país se había visto inundado por cientos de postales y rosas
y en la televisión había habido un programa con el título: ¿Sigue en vigencia
el amor?
Lali y Peter
habían tratado de comportarse como si nada de aquello fuera con ellos, pero no
lo habían conseguido del todo.
Las únicas
postales de San Valentín que se habían recibido en la casa habían sido para Peter.
Una venía de parte de Chris e iba firmada por Lali. La otra no iba firmada por
ella.
Él no tenía ni
idea de quién se la había mandado. Pero, cuando formuló la pregunta, Lali se
limitó a encogerse de hombres y sonreír fríamente. Su vida amorosa no era
asunto de ella, le dijo.
¿Qué vida amorosa?
Por fin llegó el
momento de regresar a la dura realidad.
-¿Puedes
ocuparte de los albañiles? -le preguntó.
Lali, que
todavía no había superado lo de la tarjeta de San Valentín respondió con
frialdad.
-Lo intentaré.
Él le sacó
varios muestrarios de tela y de papel pintado y se los puso sobre la mesa como
si fueran un regalo.
-Puedes elegir
lo que quieres poner -sonrió él.
-¿En toda la casa?
-Claro.
-¿Yo sola?
-Sí.
-Pero eso no
puede ser. Es tu casa.
-De acuerdo.
Entonces, quiero toda la cocina de color morado.
-Trae, dame eso.
Yo lo haré.
Lali se metió de
lleno en la decoración de la casa y se dio cuenta de que, además de gustarle,
tenía mucho talento para ello.
Para entonces,
ya había empezado a ir con Chris a una escuela de padres.
Aunque no era una
madre, sí pensaba que necesitaba conocer a otras mujeres con bebés. Tanto Chris
como ella necesitaban relacionarse.
Peter ya había
empezado a presentarle a sus amigos. Eran gente muy variada. Había actores,
escritores, y muchos otros abogados que trabajaban en la capital. La mayoría
era gente de éxito. Pero lo que realmente tenían en común era su sentido del
humor.
La aceptaron
rápidamente, aunque, en general, se apreciaba la curiosidad que provocaba la
relación entre Peter y ella.
También ella
sentía esa misma curiosidad...
Había pensado,
¿qué había pensado? ¿Había pensado que en cuanto se le fuera el período, Peter
se la llevaría al dormitorio y la seduciría de nuevo?
Pues sí,
realmente había tenido la esperanza de que eso sucediera.
De algún modo,
había contenido su deseo hasta saber que no estaba embarazada. A partir de ese
momento, había empezado a salir a borbotones.
Tenían una de
esas relaciones en las que podían hablar casi de cualquier cosa. Estaba claro
que cuando un hombre y una mujer han discutido sobre el contenido de un pañal,
pueden hablar de cualquier intimidad.
Pero había algo
que aún no se atrevía a preguntar: si la encontraba atractiva.
Se pasó toda la
tarde cantando y haciendo una tarta, mientras trataba de no atacar directamente
el tema que la perturbaba.
A aquellas
alturas sabía que se podía pasar el resto de su vida dando vueltas en círculo
sin llegar a ningún lado.
Pero no quería
eso ya. Necesitaba llegar al centro del terremoto y estaba dispuesta a
encontrar un modo de hacerlo.
Cuando Peter
llegó a casa, le preguntó si quería salir a cenar con un amigo suyo que acababa
de llegar de Francia.
Ella se quedó
pálida.
-¿Él y yo?
-preguntó realmente perturbada.
Capítulo 49
-Bueno, pensé
que tal vez no, te importaría que fuéramos su esposa y yo -dijo con una
sonrisa.
-¡Claro, por
supuesto! Por un momento pensé que me habías concertado una cita a ciegas
-admitió con un suspiro de alivio.
Estuvo
seriamente tentado de agarrarla en aquel mismo instante y llevársela a la cama
para demostrarle cuál era su idea sobre el tipo de cita a ciegas que ella debía
tener. Pero prefirió no estropearlo todo una vez más.
-Vas a conocer
al Christopher del que te hable.
-El amigo tuyo
por el que le pusimos... bueno le pusiste...
-No, le pusimos
los dos el nombre de Lucas a nuestro pequeño.
- ¡Eso es
genial! -Él sonrió.
-¿Es eso un sí, Lali?
-Sí, sí, sí. ¿Y
qué vamos a hacer con Chris... me refiero al pequeño...?
-Mi ayudante se
ha ofrecido a cuidar de él. Piensa que si se encarga del hijo del jefe habrá
ganado puntos.
Se miraron. Era
la primera vez que lo llamaba mi hijo.
-Pues me temo
que vas a tener que darme algo de mi sueldo...
-Pero, ¿no
quedamos en que usarías la tarjeta de crédito cuando la necesitaras, con la
excepción de viajes al extranjero? -bromeó él.
-Es que esto no
es para Chris ni para comprar comida -le aseguró ella-. Necesito comprarme un vestido
si vamos a salir á cenar a un restaurante fino. Él sonrió al recordar que
habían comprado el sombrero verde juntos.
Nunca antes
había salido de compras con una mujer y había sido una experiencia divertida.
-¿Quieres que te
ayude a elegirlo? - Ella dijo que no con la cabeza.
-No, mejor que
no. Prefiero ir yo sola.
Había una razón
para esa negativa, quisiera o no admitirlo: quería sorprenderlo.
Se puso el
vestido y se miró al espejo. ¿Así que sorprenderlo?
La realidad era
que parecía tener un gusto un tanto repetitivo en lo que a ropa se refería,
pues había terminado por elegir un vestido en terciopelo verde, exactamente de
la misma tela que el sombrero.
A pesar de todo,
nadie podría decir que estaba mal elegido, pues le sentaba extraordinariamente
bien.
Se puso unas
medias negras y unos bonitos zapatos de tacón y bajó las escaleras.
Obtuvo justo lo
que quería. Peter no pudo ocultar su satisfacción y algo más...
Por fin, se
encontraron con los Landry.
Christopher Landry era
un hombre grande y afable, con una gran barba. Muy pronto Lali comprendió por
qué eran amigos y por qué, además, su amistad parecía perdurar a pesar del
tiempo y la distancia.
Su mujer, Clare,
era cirujana. Una mujer simpática, inteligente, pequeña y vivaz que muy pronto
hizo buenas migas con Lali.
Christopher se sintió
muy halagado de que Peter le hubiera puesto su nombre al pequeño.
-Es todo un
cumplido, Peter -le dijo.
-No tan grande
como el que estoy a punto de hacerte -respondió él-. ¿Te gustaría ser su
padrino?
Christopher asintió y
los dos hombres se abrazaron con emoción.
Peter la
presentó simplemente como Lali, sin dar más explicaciones sobre si era o dejaba
de ser la niñera de Chris.
No sabía lo que
les habría contado antes, pero no importaba.
Fueron a comer a
las afueras de Madrid, a un impresionante restaurante de cuatro estrellas, que
estaba junto al río.
Después,
regresaron al centro, al hotel de Christopher y Clare, donde tomaron café mientras
escuchaban las deliciosas notas de un habilidoso pianista.
Continuara....
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ESPERO QUE LES HAYA GUSTADO EL MARATÓN!
Besos
@vagomi
Si k lo sorprendió,con el vestido ,pero se me hace k lo sorprende bastante a menudo.
ResponderEliminarSiguen con sus vidas como una familia.¡jajaja,me encantó como Peter delega en ella, para todo lo referente a la casa,eligiendo el morado para la cocina ,sabía k ella no aceptaría.
ResponderEliminarLali hace amigos muy fácilmente ,y todos los amigos d Peter la aceptan rápidamente.
ResponderEliminarme encantooo
ResponderEliminar@sweetlaliter
yo sigo pensandoo que son muy raros, que si pero que noo !!
ResponderEliminarIgual y me encantaron estos caps, peter se sorprendiooo muchoooo al verlaa !!y me encanta la familia que hacen, ya que se digan que se aman y se casen ajajjjaa okno, yaaa estoy es delirandoo !!!
awww como que ya casi final, ahh yo no quiero que se acabe !! cuanto falta??
Muchas gracias por la maraton !!
Karen....
Me encantaron los capis, ya son una familia, lo malo que los papis, no tienen intimidad.
ResponderEliminarMasi_ruth
no tenia ni idea que ibas a postear mas! y me dormi, asi no mas! sin esperar mas!
ResponderEliminarme encannnnnnntaaaaa!
quiero mas!
besos
De apoco se van aclarando los sentimientos de los dos!!! Que pasará después de la cena más!!!
ResponderEliminarque buena que estubo la maraton espero massss!!!!!!!!!!11
ResponderEliminarMe encantó!!!
ResponderEliminarQuiero más!!!
Lore456
Me ENCANTA :)
ResponderEliminarMe encantan cómo se llevan!
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